Cabalgaré contigo al atardecer - II (Introducción a la creación y desarrollo de personajes - Segunda parte)

Habiendo sentado en el post anterior una firme postura sobre la importancia del desarrollo de los personajes para las historias que escribimos, hoy me gustaría hacer un flashback a mi época de estudiante universitaria y sentarme ante una pila de libros (y páginas de internet) para traerles un resumen sobre algunos puntos resaltantes de la creación y el desarrollo de personajes.

Puede decirse que es demasiado sencillo, ¿no? Pero esa afirmación que sostiene que uno cree saber algo muy bien hasta que le piden explicarlo me parece bastante acertada. Es por eso que hoy me interesa investigar con el objetivo de delinear un par de conceptos fundamentales con los cuales nos encontraremos con frecuencia si nos ponemos a leer sobre la construcción de personajes literarios: la caracterización y la multidimensionalidad.

1. Primero lo primero: ¿qué es un personaje?

Según una definición interesante que encontré en este artículo, un personaje es un ente capaz de ejecutar acciones en una historia.

Como luego va desglosando el artículo, esta definición compacta nos presenta dos elementos esenciales de la naturaleza de todo personaje:

a. Es un ente: lo cual no quiere decir que sea necesariamente humano, sino cualquier entidad a la que el escritor decida dotar de la posibilidad de ejecutar una acción, y de hacerlo conscientemente.

b. Tiene capacidad de actuar: la acción es el elemento que mueve una historia y los personajes son quienes llevan adelante la acción. El personaje no es un elemento estático, invariable. Al contrario, es potencialidad, cambio, riesgo, evolución.

2. Eso que te hace único: la caracterización del personaje literario

Y nada como recurrir a Wikipedia para volver a los días más álgidos de nuestra vida estudiantil. Si bien la definición de caracterización inevitablemente va tomando forma en nuestra mente cuando leemos sobre creación de personajes literarios, debo admitir que me encantó la brevedad y claridad con que estaba planteada en la imprescindible enciclopedia global:

La Real Academia define caracterizar como "determinar los atributos peculiares de alguien o de algo, de modo que claramente se distinga de los demás".

La caracterización de un personaje para ficción puede realizarse mediante su aspecto, mediante sus acciones, palabras o pensamientos. Es decisión del autor que el aspecto físico del personaje permita intuir la personalidad del mismo, facilitando la rápida comprensión del personaje; o que los actos del personaje contradigan las ideas que pueda inducir el aspecto físico, desafiando ideas estereotipadas de la sociedad y manteniendo al lector o espectador más alerta.

En la literatura se utiliza una descripción, normalmente breve, del aspecto físico del personaje y se define la personalidad del personaje sea mediante la descripción del narrador (caracterización directa) o mediante sus actos, palabras, etc., dejando que el lector construya su propia idea del personaje (caracterización indirecta).

3. La historia de una cebolla: el personaje multidimensional o con varias capas

Me causa bastante gracia que después de haber revisado varios libros sobre creación de personajes, termine sacando las definiciones que ahora comparto con ustedes de sendas páginas web que terminé googleando. Algo así como un deja vu a los días de Rincón del Vago.

A la hora de hablar de multidimensionalidad me gustó mucho la manera en que estaba planteada en esta presentación, orientada principalmente a la creación de personajes para guiones y que les va a ser de gran utilidad a la hora de crear personajes literarios, ya que los lineamientos son muy similares.

De acuerdo con ella, un personaje multidimensional surge cuando el actor, a la hora de crear a sus personajes, le pone las suficientes ganas como para incorporar estos tres aspectos:

- Características físicas (fisiología): edad, sexo, postura, apariencia, defectos físicos y herencia genética.

- Características psicológicas (psicología): valores morales, ambiciones, frustraciones, temperamento, actitud hacia la vida, aptitudes, cociente de inteligencia y personalidad (ej: extrovertida o introvertida).

- Características sociales (sociología): clase, profesión, educación, vida familiar, vida profesional, religión, afiliaciones políticas, aficiones y pasatiempos.

4. Profe… ¿con "mis palabras" puedo poner?

El que no preguntó eso en un examen no es un estudiante normal. Y siendo que si estamos tratando de aprender más sobre este tema de la creación literaria es porque nos gusta y ya hemos superado la etapa de memorizar las cosas, es justo y necesario que sometamos lo que hemos leído hoy a un análisis que se funde en nuestra experiencia personal.

Dado que, como siempre les recuerdo con mucha insistencia, no hay reglas rígidas en este tema de la creación artística y no hay nada que esté mal si la obra y la historia funcionan, llegándole al lector por algún motivo, lo más importante que podemos sacar de todo esto es ser conscientes de nuestro propio proceso de creación de personajes. Quizás a la luz de estos elementos que hemos revisado hoy seamos capaces de encontrar nuestras propias fortalezas y debilidades, como creadores de estos entes tan especiales.

Espero que estos conceptos les resulten de utilidad y, sobre todo, despierten su curiosidad y su atención a la hora de crear a sus protagonistas, héroes y villanos. Porque así como decíamos en el post anterior, son ellos quienes realizarán la magia de ganar el cariño del lector. Son ellos quienes pueden llevarnos a la gloria y, por ello, se merecen toda nuestra atención.

Ejercicio: Satisface mi curiosidad, al estilo de la vieja escuela

Y para terminar este post, les dejo el famoso ejercicio, el bonus track.

La gente que fue a la primaria/secundaria en la década del 90 estará familiarizada con un instrumento banal a todas luces, pero que en esa época podía adquirir una importancia trascendental: el chismógrafo. De mi sexto grado allá por el año 95 recuerdo con claridad que todas teníamos uno.

Para quienes me miran raro y se preguntan qué clase de app es esa y de dónde se descarga, les explico: consistía en un cuadernito de veinte o cincuenta hojas que luego se pasaba a las compañeras (en mi caso, porque mi colegio no era mixto) para que respondieran una serie de preguntas que iban desde las inofensivas como “¿Cuál es tu color favorito?” hasta las “picantes” sobre si una ya dio su primer beso, con quién fue y dónde. Ahora se ríen, pero en ese entonces teníamos doce y no nos parecíamos a gran parte de la gente que hoy tiene doce y se mueve a velocidades que nosotros ni imaginábamos.

La propuesta de ejercicio de hoy es así entonces, bien retro: tomen un cuadernito de los que les sobran (los escritores siempre compran más cuadernos de los que necesitan) y habiliten un chismógrafo para sus personajes. Escriban una pregunta en cada página, pónganse creativos para redactarlas –yendo desde las sencillas hasta las densas– (o busquen en la web "preguntas para personajes" y entréguense a la diversión) y luego dejen a sus personajes tomar el lápiz a la hora de escribir las respuestas. Les aseguro que obtendrán información de lujo. Todos esos datos aparentemente intrascendentes les servirán muchísimo a la hora de trabajar en su historia y las diferentes capas de su personaje.

A fin de cuentas, son esos pequeños momentos y detalles los que condimentan nuestras vidas.

¬-(o_Ó)

PD: Yo también me pondré a trabajar en el ejercicio de hoy, me gusta mucho luego la idea XD Pero mañana, porque hoy estoy demasiado cansada u___u

PD2: No se olviden de pasar por la página de dibujos del Forajido Nabetse. Para celebrar el lanzamiento de un juego al que le tenemos muchas ganas y será este viernes, él hizo este dibujo de su protagonista XD

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