El secuestro de Cactus (Elementos, estructura y otras yerbas del cuento)

¡Bienvenidos una vez más al yermo! :D Elijan la roca de su preferencia y pónganse cómodos que hoy por fin voy a continuar la serie de artículos sobre el cuento que había empezado hace tres martes. En aquel entonces hablamos de cuestiones más abstractas, relativas al alma del cuento. Hoy bajaremos a tierra y veremos algunos elementos tangibles que identifican y dan cuerpo al cuento.

Que quede siempre claro que cuando conversamos sobre estas cosas no enunciamos leyes inmutables, sino puntos de vista recogidos de la experiencia y las lecturas por quienes ejercen el oficio de escribir. En este yermo traemos al tapete estos temas con el objetivo de abrir la mente de lectores, escritores y cactus, a fin de permitirles una libertad aún mayor, ya que suele decirse que hay que conocer las reglas para poder romperlas :)

Primer acto:

Los elementos del cuento

En su breve pero interesante libro titulado “Escribamos un cuento” (Let’s write a short story), Joe Bunting hace un certero análisis de los elementos que identifican al cuento. Se los resumo a continuación:

- Un personaje: los cuentos tratan sobre personas, no sobre ideas o hechos. Si no se escribe sobre personas, no se está escribiendo un cuento.

- Deseo + decisión: el protagonista debe querer algo (o no quererlo) y debe estar dispuesto a moverse para conseguirlo (o evitarlo). Debe tomar una decisión.

- Conflicto: algo que se oponga al deseo del protagonista, ya sea otra persona, la naturaleza o incluso algún rasgo de su propia personalidad.

- Cambio: todo cuento implica una transformación y ella es producto del conflicto.

- Resolución: es el momento en que el protagonista tiene éxito o fracasa en conseguir su objetivo. El lector siempre necesita la resolución.

Segundo acto:

La estructura del cuento

Si bien existen diferentes tipos de estructura de cuentos, para empezar basta con que nos centremos en la clásica: la estructura de los tres actos.

Estos tres actos son bien conocidos pero nunca está demás recordarlos:

- Primer acto o introducción: se presenta al protagonista, su mundo y llega hasta el momento en que se plantea el conflicto.

- Segundo acto o nudo: como se dice vulgarmente, el conflicto “explota” y somos testigos de la lucha del protagonista por salir airoso de este problema.

- Tercer acto o desenlace: el lector contempla el éxito o fracaso del protagonista en relación a la consecución de su objetivo.

Este esqueleto es, obviamente, lo más básico de lo básico. A la hora de la verdad puede presentarse de las maneras más diversas. Eso ya tiene que ver con el genio y el manejo del oficio del escritor. 

Tercer acto:

Conclusión

Me parece interesante ir redondeando estos apuntes con una frase de Donald Miller que el citado Joe Bunting utiliza para empezar a definir el cuento, en su obra ya mencionada: “Un cuento trata de un personaje que desea algo y supera el conflicto para conseguirlo”. En ella están contenidos los elementos enumerados en la primera parte y también se puede vislumbrar la estructura que analizamos en la segunda.

Así que como resumen viene de maravilla. Ténganla presente al momento de escribir un cuento y no podrán equivocarse. También los lectores pueden hacer el ejercicio de analizar sus cuentos favoritos a la luz de esa frase y ver si encajan con lo que ella propone. De seguro notarán que se ajustan, al menos en la mayoría de los casos.

Y para que se ejerciten, les dejo de regalo dos cuentos que me encantan:

Una sonrisa exactamente así, de Eduardo Sacheri.

Puentes como liebres, de Mario Benedetti.

Bonus track:

Dicen que las comparaciones siempre son odiosas, pero muchas veces las diferencias tienen el poder de ayudarnos a entender mejor las cosas. Por eso, pongamos al cuento frente a frente con un par de parientes suyos, miembros también del género narrativo:

a. El cuento y la novela: No es solo la extensión lo que los distingue, ya que la novela incorpora ciertos elementos que no están presentes en el cuento, tales como las subtramas. De la misma manera, mientras que en la novela podemos tener varios eventos de importancia, el cuento gira siempre alrededor de un evento principal. Esto también se aplica con los personajes: en el cuento uno es el principal, lo cual no necesariamente es así en la novela.

Se nos plantea entonces tal y como dice la famosa frase atribuida a Cortázar y que él a su vez atribuye a “un escritor argentino, muy amigo del boxeo”: “la novela gana siempre por puntos, mientras que el cuento debe ganar por knockout”.

b. El cuento y el relato: Aquí entramos en un terreno vidrioso, ya que muchos autores y estudiosos de la literatura prefieren no distinguir entre relato y cuento. En mi experiencia personal –conforme a lo que pude leer y aprender– la distinción sí está justificada si consideramos al relato como un escrito en prosa que describe un evento o situación que no conduce a un punto de tensión o conflicto ni a una resolución como en el cuento. Se trata de una obra eminentemente descriptiva y que carece de los tres momentos que distinguen al cuento como tal. 

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Espero –como siempre, porque escribo poniéndole mucho cariño–, que hayan disfrutado y encontrado útil este artículo. El dibujo está genial, díganme si no XD

Hasta el próximo martes y que sus palabras fluyan.

¬-(o_Ó)

PD: Como todo el mundo, yo tenía esa tendencia a aburrirme mientras estudiaba para los exámenes y, para hacer el tema más entretenido, solía hacer en el borde de las hojas dibujitos muy simples –entiéndase personitas palito– que ilustraban algunas de las situaciones que caían dentro del temario. Uno de los momentos más satisfactorios de mi vida universitaria se dio cuando una de las tantas personas que fotocopió mis apuntes de clase me dijo que retuvo un determinado punto más por los dibujitos que por la explicación. Es nuestro deseo, con el forajido Nabetse, que la imagen de hoy cumpla similar función. Así la próxima vez que piensen en los elementos y la estructura del cuento se acuerden de estos dos forajidos, de Cactus y de su nueva amiga Tuna XD

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RECURSOS: A los lectores que manejan el inglés, les recomiendo “Let’s write a short story” de Joe Bunting. Sin dar demasiadas vueltas, analiza varias cuestiones de importancia relativas al cuento. Las razones por las cuales conviene escribir cuentos y las verdaderas razones por las cuales los escritores debemos escribir son muy interesantes :)